A un mes de haber concluido las elecciones, volantes, mantas y otros residuos de propaganda electoral continúan en las calles. Aunque los partidos políticos anunciaron que retirarían y darían un tratamiento a lo recolectado, los planes de reciclaje que presentó cada uno no cuentan con detalles de cómo será tratada la basura electoral, de acuerdo con una revisión hecha por Causa Natura Media.
“Mandaron un ‘plan de reciclaje’, entre comillas, que no incluye nada de lo que pide la ley porque en la mayoría lo único que se encargaron de hacer fue copiar y pegar información general sobre qué es el reciclaje, cuáles son los tipos de plásticos, los diferentes tipos de reciclaje y otra información teórica nada más para llenar el documento”, señaló Ornela Garelli, campañista de Océanos sin Plásticos de Greenpeace México.
Desde el proceso electoral, Greenpeace señaló que la recolección de la propaganda sería insuficiente. Y pidió a los partidos y coaliciones que hicieran públicos sus planes de reciclaje, así como los informes de los materiales que utilizaron y el estimado de su huella plástica. Peticiones que no fueron resueltas.
Para esta publicación, la Unidad de Periodismo de Causa Natura Media pidió los planes de reciclaje de cada partido político a través de solicitudes de información. Todos respondieron con excepción de Morena y el Partido Acción Nacional (PAN). Estos dos indicaron que el Instituto Nacional Electoral (INE) era el encargado de otorgar la información, por lo que se remitió la solicitud al instituto para poder acceder a sus planes.
Tal como lo describe Garelli, los planes de reciclaje no cuentan con especificaciones sobre cómo será tratada la basura electoral. “Lo que realmente tendría que tener un plan son las medidas para asegurarse de recolectar todas estas lonas y pendones; qué empresa se las va a llevar para que en efecto se reciclen; qué tipo de reciclaje se va a utilizar, y qué se hará con los productos que resulten de ese reciclaje”, explicó.
Sin detalles
De acuerdo a la Fundación por el Rescate y Recuperación del Paisaje Urbano, para el proceso electoral de este año se generaron entre 25 y 30 mil toneladas de residuos electorales tan sólo en la Ciudad de México.
En el artículo 209 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales del INE se establece que “toda la propaganda electoral impresa deberá ser reciclable, fabricada con materiales biodegradables que no contengan sustancias tóxicas o nocivas para la salud o el medio ambiente” y que los “partidos políticos y candidatos independientes deberán presentar un plan de reciclaje de la propaganda que utilizarán durante su campaña”.
Mientras que en el artículo 295 del Reglamento de Elecciones del INE se detalla que los partidos deberán presentar informes durante la precampaña y campaña que incluyan los nombres de los proveedores contratados para la producción de la propaganda electoral; el plan de reciclaje de la propaganda, y los certificados de calidad de la resina utilizada en la producción de su propaganda electoral impresa en plástico.
En los planes de reciclaje de los partidos políticos, entregados por el INE, se encontró que todos los partidos aseguran que al final de las elecciones habrá una recolección en centros de acopio para, posteriormente, ser llevado a reciclaje o reutilizarse, principalmente, para donarse a comunidades de México.
Sin embargo, ninguno detalló cuántos centros de acopio se destinan, durante qué periodo estarán en operación y cómo se logrará el proceso de reciclaje y reutilización de cada tipo de propaganda, considerando primordialmente lonas y pendones, pero dejando en segundo plano el destino de volantes y calcomanías.
En el caso de Morena, desde el informe de precampaña indicó las empresas y los materiales que se utilizaron para la propaganda electoral. Además de establecer algunos compromisos como el uso de plásticos biodegradables y de tintas a base de agua que resulten más amigables con el medio ambiente.
“En ese sentido, se buscará que los plásticos a utilizar en la propaganda electoral se biodegraden correctamente y que se elimine la producción de CO2 (dióxido de carbono), factor determinante en el efecto invernadero”, señala el plan.
Además de estas menciones, la mayor parte de la información es teórica. Se trata de definiciones de conceptos como reutilizar, reciclar, reducir y recuperar, y explicaciones de cómo se forman los plásticos biodegradables.
Por su parte, el Partido Acción Nacional (PAN) realizó un desglose un poco más detallado de quienes serían sus proveedores encargados de retirar la propaganda y algunos de sus objetivos tras la recolección. Por ejemplo, para playeras y gorras de tela señalaron que podrían ser reutilizadas por la población; las bolsas ecológicas se proponen para producir ganchos de ropa y tapas de bebidas, y algunas de las lonas podrían cubrir ventanas y toldos de comunidades afectadas.
Sin embargo, no existe una descripción del tipo de plásticos con los que están hechos cada uno de los impresos y cuántos de éstos serán destinados a los objetivos que proponen.
En el caso de Movimiento Ciudadano (MC) se entregó la lista de proveedores junto con los certificados donde las empresas mencionan de forma breve el tipo de materiales y el trabajo que realizan. Mientras que el plan cita de manera general las tecnologías de reciclaje y el procedimiento de recolectar en centros de acopio.
“Que la propaganda electoral podrá ser donada a zonas o comunidades rurales y a quien la solicite para un fin determinado, para lo cual será necesario capacitar a los ciudadanos para la colocación del material plástico, como lo es en los tejados de viviendas, escuelas y demás”, concluye el plan de reciclaje de MC.
Por su parte, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido de la Revolución Demócrata (PRD), Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y Partido del Trabajo (PT) también se limitaron a dar definiciones de las etapas de reciclaje, nombre de proveedores y menciones generales de los tipos de plásticos como el tereftalato de polietileno (PET), policloruro de vinilo (PVC) y el poliestireno de baja densidad (PEBD) y alta densidad (PEAD).
Respecto a los materiales y la propuesta de donar lonas a las comunidades que necesiten infraestructura para sus hogares, Greenpeace señaló que los partidos no están considerando los tipos de materiales para lograr esta propuesta.
“Por ejemplo, el polietileno se utiliza para hacer bolsas y eso sí podría reciclarse, pero las lonas que estuvieron hechas de PVC requieren un reciclaje que se complica, no hay muchas empresas que lo hagan, y además sería un reciclaje tóxico, porque el PVC tiene sustancias químicas añadidas que resultan en toxicidad y eso puede tener implicaciones para la salud”, explicó Ornela Garelli.
Huella plástica
Recientemente Greenpeace México informó que envió una carta dirigida a Guadalupe Taddei Zavala, presidenta del Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE), para pedir que se atienda el problema de la basura electoral y se transparente la huella plástica que permita estimar la cantidad de materiales de propaganda electoral impresos.
El equipo de Causa Natura Media también solicitó vía transparencia los tipos y las cantidades de propaganda impresa y el presupuesto invertido, pero sólo MC y el PVEM entregaron un desglose.
En el caso de MC se imprimieron más de 70 mil calcomanías, más de dos millones de volantes, un millón 579 mil dípticos y 133 mil 100 stickers sólo para promover la candidatura a la presidencia. Mientras que el PVEM imprimió más de 363 mil metros cuadrados de lonas para espectaculares y mil 44 metros cuadrados de vinilos, lo que en total equivaldría a 50 canchas del Estadio Azteca.
Otros partidos como el PRI argumentaron que se trata de información de “competencia estrictamente federal”, por lo que no dieron respuesta. Por su parte, Morena, PAN y PRD dieron enlaces de información pública que no especifican la información requerida como las cantidades de propaganda electoral impresa.
De acuerdo con organizaciones como Greenpeace, ONU Medioambiente, Natura y World Wilde Life, la huella plástica permite entender cuánta de la producción de plástico termina como residuo en el medio ambiente.
“No hay estudios específicos para basura electoral, pero como ya sabemos de qué plásticos está hecha, podríamos esperar que el impacto ambiental sea similar (al de otros productos plásticos) y en ese caso sí hay muchos estudios al respecto. Por ejemplo, al año ingresan al menos 14 millones de toneladas de residuos plásticos a los océanos; hay otros estudios que estiman que flotando en los océanos hay alrededor de cuatro trillones de residuos y, una vez que estos llegan, hay otros estudios que indican que estos interactúan con cerca de 700 especies marinas a las que puede ocasionar problemas como atragantamiento, estrangulamiento y asfixia”, explicó Ornela Garelli.
Para organizaciones como Greenpeace, en un plano ideal serían necesarias unas elecciones en las que ya no exista propaganda impresa. Aunque también consideran indispensable que se elaboren planes de reciclaje completos e integrales “como parte de un compromiso público” y que los partidos políticos busquen otras alternativas de difusión como los medios digitales.
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