La pesca de arrastre un método de pesca que consiste en arrastrar redes lo largo del suelo marino para levantar todo lo que encuentran a su paso, se tiene registro de su uso desde 1376. En el caso de México han sido utilizadas desde principios del siglo XX, principalmente para las pesquerías del camarón y escama.
Si bien una de las mayores críticas a esta arte de pesca es que no es selectiva, en México se han hecho modificaciones al arte y regulaciones para disminuir los daños ambientales. Estas han sido modificadas por los pescadores y rederos mexicanos, a partir de redes originalmente usadas en los Estados Unidos de América. Asimismo, la FAO, el INAPESCA y organizaciones de la sociedad civil han invertido en investigación para desarrollar nuevas artes más selectivas y que reduzcan el costo de combustible como el proyecto de la FAO e INAPESCA “Gestión sostenible de la captura incidental en la pesca de arrastre del camarón de América Latina y el Caribe” (REBYC II LAC)”.
¿Cómo está regulada la pesca de arrastre?
Actualmente la pesquería del camarón, que es donde se utilizan en mayor medida las redes de arrastre, está regulada por la Norma Oficial Mexicana NOM-002-Pesc-1993. Esta ha sido modificada en 1997 y 2006. De igual forma existen regulaciones regionales que establecen el uso de sistemas de pesca selectivos, así como una zona de refugio para la protección de diversas especies biológicas en la franja marina de la 0 a 9.15 m de profundidad, en donde está prohibida la pesca con el sistema de arrastre.
Por su parte, también existen regulaciones en acuerdos internacionales que México ha firmado. Por ejemplo, en el T-MEC se menciona que las partes promoverán la conservación de especies como los tiburones, tortugas y mamíferos marinos a través de mejor conservación y manejo pesquero. Las medidas incluyen estudios específicos de artes de pesca, recolección de datos sobre pesca incidental y promoción de acciones para reducirla.
En México: ¿quién realiza la pesca de arrastre?
Según los permisos y concesiones otorgados por la CONAPESCA, la pesca de altura hace un mayor uso de las redes de arrastre. El 47% de las embarcaciones mayores, unas 1,419 embarcaciones, utilizan redes de arrastre en 2021, mayoritariamente para la pesca de camarón. Si bien existen diferentes tipos, como la pesca de arrastre de media agua y pesca de arrastre de fondo, en los permisos y concesiones no se especifica el tipo arrastre.
En contraste, las embarcaciones menores utilizan con menos frecuencia esta arte de pesca. Se tienen 615 embarcaciones artesanales que tienen permisos que la utilizan en 2021 En Sinaloa, la entidad con mayor producción de camarón, no hay ninguna embarcación menor que utilice redes de arrastre con permiso. Esto se debe a la creación de las redes suriperas en dicha entidad en 2006.
Las redes suriperas fueron derivadas de capacitaciones técnicas que dio lugar a la confección de una red de pesca con la misma malla de las atarrayas, pero con un sistema de arrastre impulsado por el viento o por la corriente marina, en redes con bolsas de trampas. Estas redes son más selectivas, excluye en gran manera a la pesca incidental de otras especies y reducen el uso de combustible al ser impulsadas por el viento.
¿Dónde se realiza el arrastre para camarón?
Debido a que la mayor parte de los permisos para arrastre de camarón son de embarcaciones mayores, analizar los datos públicos del Sistema de Localización y Monitoreo Satelital de Embarcaciones Pesqueras (SISMEP) nos puede dar una idea de dónde se realiza el arrastre en México. Cabe mencionar que de acuerdo con NOM-062-PESC-2007, todas las embarcaciones mayores permisionarias o concesionarias están obligadas a reportar información al SISMEP.
De acuerdo con los datos del SISMEP, en el caso de la pesca de arrastre de camarón por embarcaciones mayores, resalta la disminución de embarcaciones con permiso vigente que reportan información. Durante los meses de septiembre, cuando se levanta la veda del camarón en el Pacífico, en el 2018 solamente el 7% de las embarcaciones con permiso no reportaron información al SISMEP, sin embargo, este porcentaje aumentó al 28% en 2021. Esto se puede deber a una disminución de las embarcaciones camaroneras que salen a pescar o a un sub-reporte del SISMEP.
Además de una disminución en de las embarcaciones que no reportaron información, también hay una notable disminución de viajes. En el siguiente gráfico puedes explorar los viajes reportados por dichas embarcaciones de 2018 a 2021.
Esta disminución de actividad de las embarcaciones camaroneras es notable tanto en el Golfo de México como en las costas del Pacífico. Si bien, las rutas de los barcos pesqueros no indican el esfuerzo pesquero, si nos puede ayudar a ver cuál es el alcance de la actividad.
La información pública de permisos y el SISMEP son herramientas fundamentales para entender con mayor detalle dónde se realiza la pesca de arrastre. Aún falta explorar cuáles han sido los efectos sobre los ecosistemas, hasta qué punto se está cumpliendo con la regulación y qué tipo de innovaciones tecnológicas pueden ayudar a un mejor aprovechamiento de la pesquería de camarón en México.
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